El avispón gigante japonés
La avispa asiática gigante, o avispón gigante japonés, es un avispón originaria de Asia. Se caracteriza por tener la cabeza de color naranja claro, las antenas marrones, con la base amarillo-anaranjada, el abdomen presenta bandas alternas de color naranja-amarillo y negro. El sexto segmento es de color amarillo.
La avispa asiática gigante puede superar los 4,5cm de largo, de ahí su nombre. Además, su veneno es muy potente, pudiendo llegar a ser mortal para los humanos. Tanto es así, que las cifras de defunciones que ofrece Japón respecto a los ataques producidos por el avispón gigante japonés, indican que produce unas 50 muertes al año. Se trata pues de una cifra que bien merece respeto y cautela ante la posible invasión de esta especie invasora. Y es que los ataques grupales del avispón japonés pueden inyectar en las víctimas una cantidad de venenos equivalente al que inyecta una serpiente.
Recientemente, la avispa asiática gigante se ha dado a conocer por su introducción en los Estados unidos de América, donde ya se han puesto a trabajar a destajo para evitar la expansión del avispón gigante japonés por todo su territorio, más aún, cuando se ha descubierto que sus picaduras pueden ser letales incluso para personas que no son alérgicas a la picadura de avispa.
Por si esta carta de presentación no fuera suficiente, recientemente se hizo viral un video grabado en Washington, donde una avispa asiática gigante mata a un ratón, clavándole varias veces su aguijón.about:blank
presencia en España del avispón gigante japonés
En España todavía no se ha detectado su presencia de forma oficial, aunque si hay gente que asegura haberlas visto. Sea como fuere, el gobierno español a través del ministerio para la transición ecológica, ya ha incluido a la avispa asiática gigante en el catálogo de especies invasoras, para poder actuar con rapidez y contundencia en el momento en que efectivamente se constate la presencia del avispón japonés en nuestro país, y poder controlar así su expansión, evitando la situación que ocurrió con la llegada de la avispa velutina, que ante la falta de medidas, esta ha ido colonizando territorios a su antojo, convirtiéndose en un auténtico problema en comunidades como Galicia o Asturias.
Peligro para las abejas melíferas
Al igual que la avispa velutina, la avispa mandarinia (avispa asiática gigante o avispón gigante japonés) es un peligro para las abejas melíferas europeas que son 5 veces más pequeñas que el avispón gigante, y no disponen de defensas.
En Japón cada año se importan millones de abejas melíferas europeas porque producen más miel que las autóctonas de Japón, y cada año millones de ellas mueren a manos de la avispa asiática gigante, por lo que su llegada a nuestro país, sumado a la presencia de la avispa velutina, puede ser terrible para el sector de la apicultura, y para la naturaleza en general, y es que las abejas son capaces de polinizar unas 25.000 especies de plantas en el mundo.
A diferencia de la abeja melífera europea, la japonesa ha desarrollado defensas contra la avispa asiática gigante para defender sus colmenas, y es que la abeja japonesa es capaz de coordinarse para rodear al avispón gigante japonés, y moviendo sus abdómenes, crean una bola de abejas que en su interior alcanza una temperatura de 47ºC, suficiente para matar a la avispa asiática gigante, que muere a los 46ºC, pero sin llegar a los 48ºC a los que mueren las abejas japonesas.
El ciclo biológico de la avispa asiática gigante
El avispón gigante japonés, anida en las tierras bajas y en los bosques al pie de las montañas. Hacen nidos subterráneas usando huecos generados por caídas de árboles, o reutilizando madrigueras abandonadas.
Dentro de estos nidos pueden llegar a tener de cuatro a siete panales, algunos de ellos pueden tener más de 1000 celdillas.
Las reinas son las únicas que sobreviven al invierno. Cuando llega la primavera emergen en busca de savia para alimentarse y buscan un lugar donde anidar. En un primer momento criará alrededor de 40 obreras, y estas serán las empezarán a trabajar en el nido. A principios de agosto el nido alcanzará su desarrollo y desde mediados de septiembre ya no se producirán más huevos, y se dedicarán a criar las larvas de las últimas camadas de donde saldrán las futuras reinas, hasta que, a finales de octubre, la reina de avispa asiática gigante morirá. Los machos y las reinas de las últimas camadas copularán, y las reinas buscarán algún lugar subterráneo donde pasar el invierno.